Más de 160 profesionales de las principales organizaciones humanitarias, así como de los círculos académicos y políticos, participaron en las deliberaciones. Organizada en torno a siete temas clave, la Reunión Anual brindó la primera oportunidad de reunir a negociadores humanitarios experimentados de manera informal con el objetivo de revisar una serie de retos y dilemas que surgen en sus prácticas.

En general, los participantes reconocieron que los profesionales humanitarios que participan en negociaciones humanitarias se enfrentan a entornos cada vez más complejos que requieren nuevas capacidades y recursos para analizar las situaciones de conflicto y las redes de actores, comprender las perspectivas de las contrapartes, así como prever vías prácticas para garantizar la aplicación de los acuerdos negociados. Los negociadores humanitarios deben ser capaces de recurrir a las normas locales y a las redes sociales para crear un sentimiento de propiedad en torno a las necesidades humanitarias y a los acuerdos propuestos. También deben ser conscientes de las percepciones de las contrapartes sobre las posibles dimensiones o implicaciones políticas de las actividades humanitarias. Una observación central de los participantes se refería a la importancia de compartir las experiencias de negociación a través de comunidad de intercambio de prácticas para aprender colectivamente y explorar formas de mejorar las prácticas y los resultados de la negociación.

Los participantes observaron una falta de comprensión dentro de las agencias de ayuda del carácter estratégico de las negociaciones humanitarias, lo que hace que los negociadores humanitarios estén a menudo aislados y con pocos recursos. Asimismo, las prácticas de negociación en primera línea parecen ser raramente discutidas en los círculos políticos. En consecuencia, los negociadores humanitarios de primera línea suelen tener una orientación limitada en la planificación de los procesos de negociación, el diseño de los acuerdos humanitarios y la evaluación de los costes y beneficios de las opciones tácticas.

En este contexto, los participantes presentaron una serie de expectativas con respecto al nuevo Centro de Competencia en Negociación Humanitaria, entre las que se incluyen la oferta de oportunidades de desarrollo profesional adaptadas a las necesidades de los negociadores humanitarios de primera línea, el desarrollo de herramientas prácticas de análisis y planificación para los profesionales sobre el terreno, la preparación de estudios de caso que analicen los retos y dilemas recurrentes de las prácticas de negociación humanitaria y la creación de un espacio seguro para el intercambio de experiencias entre los profesionales sobre el terreno.

El Centro de Competencia, junto con los Socios Estratégicos, donante, y los miembros de comunidad de intercambio de prácticas, revisará cuidadosamente estas expectativas mientras el Centro de Competencia planifica su primer año de actividades.