En nuestro último blog, exploramos la intersección entre la negociación humanitaria y la diplomacia y los distintos pasos que contribuyen a su eficacia.
Seguir nuestras orientaciones te ayudará a impulsar los programas humanitarios a través de canales diplomáticos.
Pero, ¿qué hacer cuando te encuentras en un callejón sin salida y crees que no hay forma de llegar a un acuerdo común?
Exploraremos distintas vías para encontrar soluciones alternativas en tus negociaciones.
Pero antes, empecemos con un pequeño repaso...
Una diplomacia humanitaria eficaz requiere:
Los pasos 1 a 4 se detallan en nuestro último blog.
Paso 5: Proponer alternativas
Una vez hayas priorizado las cuestiones en juego, identificado los actores pertinentes, analizado los intereses y los motivos, priorizado los objetivos y los mensajes clave, deberás preparar múltiples situaciones hipotéticas para tu proceso de negociación.
Comenzar por negociar tu objetivo ideal aumentará las posibilidades de que tu negociación sea exitosa. Sin embargo, deberás a dialogar sobre opciones aceptables en caso de que tu objetivo resulte inalcanzable o innegociable.
¿Cuántas alternativas tienes?
Consideremos la siguiente situación: imagina que estás a cargo de una distribución de alimentos, y tu interlocutor te pide la información personal de las personas a las que tu organización brinda ayuda.
Podría parecer como si solo tuvieras dos opciones:
- Compartir la información personal.
- No compartir la información personal.
¿Es correcto? En realidad no....
Replanteémonos las opciones y reflexionemos sobre opciones más aceptables.
Ten en cuenta lo siguiente:
- Si te entrenas para pensar más allá de las especificidades de las peticiones de tu contraparte, anticipas algunas de ellas, y te preparas, podrás explorar más alternativas.
- A menudo, tu contraparte puede solicitar ciertas cosas para ponerte a ti y a tu organización en una situación en la que sea difícil hacer una concesión. Sin embargo, también puede deberse a algo más. Por ejemplo, si tu contraparte solicita información o dinero, puede estar relacionado a su tendencia a querer controlar la situación, su preocupación por la forma en la que trabajan las organizaciones humanitarias o una falta de información sobre los métodos y enfoques humanitarios. Aprovecha estas situaciones y conviértelas en oportunidades para comprender los motivos detrás de ellas.
- Existe una diferencia entre lo que la gente pide, lo que quiere y lo que necesita.
- Asegúrate de construir un equipo de negociación diverso. Piensa en el género, la experiencia y la formación de cada miembro y cómo tu contraparte percibe estas características para ayudarte a proponer alternativas más aceptables.
Paso 6: Desarrollar tu estrategia
Una estrategia de negociación eficaz depende de una buena comprensión del contexto, los objetivos, los actores, los intereses y las soluciones alternas. La estrategia es el resultado de todos los pasos anteriores.
Una estrategia de diplomacia humanitaria eficaz se construye, no se fuerza.
Aunque existen tácticas que pueden ayudarte a preparar mejor una negociación, es importante reconocer que la diplomacia humanitaria se enfrenta a menudo a dilemas complejos sin una solución perfecta.
Recientemente, Peter Maurer, antiguo diplomático suizo y Presidente del Consejo de Administración del CCHN, nos recordó que:
"No existen soluciones fáciles para las polaridades y los dilemas; sólo se puede navegar a través de ellas".
¿Cómo puedes tú, como profesional de la diplomacia humanitaria, sortear estas disyuntivas?
Empieza por explorar las posibles polaridades.
Las polaridades ofrecen dos opciones, cada una con sus ventajas y desventajas. Rara vez hay una solución "correcta" o definitiva.
A continuación te presentamos una lista de polaridades tácticas que deberás tener en cuenta al desarrollar tu estrategia.
Ten en cuenta lo siguiente:
- Puede que tengas que adaptar tus tácticas a los actores, objetivos y situaciones a los que te enfrentas.
- Puedes oscilar entre polaridades. Por ejemplo, puedes optar por formar parte de una alianza cuyo objetivo es negociar una cuestión humanitaria general y, al mismo tiempo, mantener un diálogo bilateral sobre una cuestión que supone un reto para tu organización.
- Debes reevaluar tus tácticas tras cada conversación y adaptar tu estrategia en función.
Se requiere práctica, experiencia y capacidad de adaptación para aprender qué táctica funciona con qué contraparte y en qué situación.
No hay atajos.
Según Peter Maurer, este proceso:
"Es como caminar por un callejón oscuro. Los ojos tardan en adaptarse".
Recuerda...
Una diplomacia humanitaria eficaz requiere:
- Definir el problema y establecer prioridades
- Identificación de los agentes y partes interesadas
- Analizar los intereses y motivos de individuos y Estados
- Definición de objetivos y mensajes
- Proponer alternativas
- Desarrollar su estrategia
Estos pasos te permitirán entablar relaciones, promover el diálogo y buscar puntos en común para poner en relieve los intereses y valores que tengas en común con tu contraparte.
¡Ánimo!