Llevar a cabo operaciones humanitarias en zonas afectadas por la violencia de pandillas requiere adoptar un enfoque estratégico.
Este tipo de entorno suele ser volátil, impredecible y de difícil acceso.
La violencia puede pasar rápidamente de una zona a otra o aumentar de intensidad en un instante, poniendo en peligro los programas humanitarios.
Las pandillas suelen estar fragmentadas y cambian constantemente, lo cual dificulta identificar quién es quién, establecer líneas de comunicación claras y llegar a acuerdos duraderos sobre los términos de las intervenciones humanitarias.
El acceso a las zonas afectadas se dificulta ya que están controladas por distintos grupos —a menudo rivales—, y las fronteras entre los territorios de cada uno suelen ser desconocidas para quienes no pertenecen a ellos. Cruzar estas "fronteras invisibles" puede poner en peligro tanto a la población local como al personal humanitario que intenta ayudarla.
Estas son las seis mejores estrategias de negociación compartidas por profesionales de vasta experiencia para acceder y operar con eficacia en zonas controladas por pandillas.
1. Entender cómo piensan y actúan las pandillas
Las pandillas nacen de los esfuerzos de las comunidades por satisfacer sus necesidades allí donde el Estado no ha logrado hacerlo.
Al unirse a las pandillas, sus miembros buscan protección, supervivencia y pertenencia, alimentados por la pobreza, la exclusión y la falta de oportunidades.
Las pandillas proliferan en países con instituciones donde imperan la corrupción y la impunidad, lo que les ayuda a alcanzar inmensos niveles de control social y territorial.
Por lo general, estos grupos no tienen objetivos políticos. Más bien buscan crear el entorno adecuado para sus actividades ilícitas, por ejemplo, infiltrándose en las instituciones locales y conspirando con ellas a su favor.
Para el personal humanitario que trabaja en estos entornos, desarrollar una respuesta humanitaria eficaz requiere ser consciente de cómo piensan y actúan las pandillas.
Para ello, es necesario recopilar información sobre el territorio, la identidad y las creencias de una banda. Resulta importante preguntarse: ¿Qué lógica guía sus acciones? ¿Qué necesidades intentan satisfacer? ¿Quién está conectado con quién?
En el terreno, no siempre está bien visto nombrar a las maras o pandillas, porque decir "pandilla" da miedo y decir "mara" ofende, así que es preferible hablar de los "muchachos", que es un término aceptado.
- Profesional humanitario que trabaja en El Salvador
Es fundamental comprender el papel de cada actor, cómo se forma la estructura de la pandilla y cómo se relacionan con otros actores de la comunidad.
La violencia generada por las pandillas está muy arraigada en las comunidades y puede ser difícil trazar la línea divisoria entre un miembro de una banda o cartel y las personas que no están implicadas en estos grupos.
Por eso es importante...
2. Reforzar los lazos con la comunidad
Una vez que tengas un conocimiento básico de cómo funciona una pandilla, enfócate en establecer una relación continua y duradera con la población a la que asistes.
Una relación de trabajo estrecha con las comunidades permite comprender mejor sus necesidades. En los contextos afectados por la violencia de las pandillas, los especialistas hablan a menudo de consecuencias humanitarias "invisibles", como la falta de acceso a la educación y la sanidad. A menudo, esto se debe a que la gente no puede moverse libremente por miedo ser víctima de la violencia.
La inseguridad generalizada también hace que las comunidades desconfíen de nuevas organizaciones. Si vas a establecer la presencia de tu organización, asegúrate de disponer de un plan de comunicación y de mensajes clave listos para responder a preguntas básicas sobre la misión, el alcance y el trabajo de tu organización.
Otra estrategia para crear proximidad consiste en identificar a las personas más respetadas de la comunidad. ¿Quiénes son sus líderes? ¿La opinión de quién tiene peso? Identifica a las personas influyentes que podrían ser un punto de contacto inicial para dar credibilidad a tu organización dentro de la comunidad.
Cuando estableces el contacto por primera vez, es posible que no sepas cómo y dónde iniciar una conversación. Es importante encontrar puntos en común con las comunidades y definir en consecuencia los temas de conversación que te ayudarán como punto de entrada.
Una vez establecida la presencia de tu organización en una comunidad, puedes pasar al siguiente paso...
3. Generar confianza siendo previsibile y transparente, y garantizar continuidad
Asegurarse de que las comunidades confían en tu organización te ayuda a brindarles una mejor asistencia y a mantener a tu equipo seguro.
Una de las principales formas de generar confianza es ser previsible. Siempre que sea posible, asegúrate de respetar las rutinas operativas. Por ejemplo, preséntate en la zona el día previsto y a la hora acordada, con el mismo conductor y equipo humanitario, utilizando un vehículo con la misma matrícula y con las ventanas abiertas (no tintadas). Asegúrate de que tu equipo utilice también elementos de identificación, como un chaleco con el logotipo de tu organización.
Siempre que puedas, planifica las actividades de forma transparente. Ten en cuenta que alguien relacionado con las pandillas debe estar presente para observar y escuchar cuando presentes tus planes. A continuación, asegúrate de llevar a cabo las actividades humanitarias abiertamente a la vista de la comunidad, en la medida de lo posible en forma de asamblea.
Por último, evita la rotación de personal constante y asegura la continuidad de los interlocutores y la comunicación. A largo plazo, esto te permitirá mantener el acceso y profundizar en el conocimiento de las necesidades de las comunidades, así como de la evolución de las formas de actuar de las pandillas.
En general, establecer una relación de confianza ayudará no sólo al acceso de su organización, sino al sector humanitario en su conjunto. Debido a la desconfianza de las pandillas hacia los actores desconocidos, el acceso de una organización puede verse favorecido o dificultado por el comportamiento previo de otra organización.
4. Asegurarse de contar con apoyo psicológico
Garantizar la continuidad del personal, así como de los canales de comunicación, también implica exponerse a entornos violentos a largo plazo, lo cual puede repercutir en tu bienestar y el de tu equipo.
Experimentar presión crónica puede afectar la capacidad de tu equipo para tomar decisiones, aumentar la toma de riesgos y afectar las relaciones laborales debido al estrés permanente.
Trabajar en un entorno tan impredecible puede dificultar la concentración, el acceso a soluciones y al pensamiento creativo, y reducir tu capacidad de sentir empatía o comunicarte de forma eficaz.
Siempre que sea posible, busca apoyo psicológico tanto para ti como para tus colegas. También puedes aumentar tu resiliencia desarrollando habilidades para manejar el estrés y aprendiendo técnicas de autocuidado.
5. Supervisar y gestionar la percepción de tu organización
Profesionales del sector con vasta experiencia compartieron que, a menudo, cuanto más concreta y tangible sea la asistencia brindada, mejor será percibida.
Por ejemplo, las pandillas suelen acoger de buena gana la distribución de raciones alimentarias porque consideran que beneficia directamente a la comunidad. Los programas educativos también suelen ser bien valorados porque las familias los ven como una posibilidad de ascenso social.
Sin embargo, las pandillas no siempre responden de forma positiva a las operaciones en torno a la asistencia sanitaria o la protección, porque sus miembros temen que estas actividades puedan exponerlos a denuncias a las autoridades si acuden a un hospital público, por ejemplo.
Además, los especialistas recomiendan tener en cuenta el momento de la intervención humanitaria. Por ejemplo, visitar una comunidad poco después de que la policía haya llevado a cabo una operación podría percibirse como una asociación con ellos, lo que podría socavar la confianza en tu organización.
En estos contextos, las operaciones humanitarias pueden desarrollarse gracias a la percepción positiva que las pandillas pueden tener de las contribuciones a las comunidades, sobre todo si son útiles y necesarias para su bienestar.
6. Intercambiar con profesionales del sector humanitario
Imagínate conocer a otros y otras profesionales del sector humanitario, de diferentes organizaciones y contextos, y hablar de tus experiencias trabajando en zonas controladas por pandillas. Puedes hacerlo participando en un taller sobre negociación humanitaria e involucrándote en las actividades organizadas por nuestra comunidad de intercambio de prácticas.
En 2023, reunimos a más de 40 profesionales que compartieron sus puntos de vista sobre lo que supone trabajar y negociar en entornos donde están presentes las pandillas.
Gracias a su experiencia, captamos y analizamos sus prácticas actuales de negociación, que pueden servir de orientación a profesionales del sector humanitario que trabajan en contextos similares.
Esta entrada de blog es un resumen de sus recomendaciones. Puedes leer la versión completa aquí.
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